viernes, 12 de septiembre de 2008

¿Qué es el nirvana?

El nirvana es el estado de estar liberado tanto del sufrimiento como del ciclo de renacimientos, por tanto significa un cese de la actividad mental corriente y una liberación espiritual. Es un concepto importante en el Hinduismo, Jainismo y Budismo y suele alcanzarse mediante diferentes prácticas y técnicas espirituales. En todas estas religiones, la palabra nirvana tiene connotaciones de quietud y paz.

Es interesante la metáfora con la que se explica el nirvana:  “La persona que experimenta el nirvana se compara con un fuego apagado cuando su provisión de combustible se ha extinguido. En todas ellas también este combustible sería la falsa idea del Yo, que causa (y es causada por) el deseo, la necesidad, la conciencia, el nacimiento, la muerte, la codicia, el odio, la confusión, la ignorancia. Entonces el nirvana no sería un sitio ni un estado, sino una verdad absoluta que debe ser experimentada.”

Centrándonos en el budismo, Gautama Buda se refería al nirvana de la siguiente manera: «Hay una condición donde no hay tierra, ni agua, ni aire, ni luz, ni espacio, ni límites, ni tiempo sin límites, ni ningún tipo de ser, ni ideas, ni falta de ideas, ni este mundo, ni aquel mundo. No hay ni un levantarse ni un fenecer, ni muerte, ni causa, ni efecto, ni cambio, ni detenimiento».

Como no se puede definir el nirvana con palabras, se lo suele delimitar por lo que no es:

  • No es la existencia común a la que está sujeto el ser humano.
  • No tiene principio ni fin (no se encuentra dentro del tiempo medible).
  • No se puede generar o fabricar.
  • No tiene dualidad, por lo que no puede ser descrito con palabras.
  • No es un estado subjetivo de conciencia.
  • No está condicionado a nada o por nada.
  • No es ningún tipo de desarrollo o conversión.
  • No tiene partes o etapas que se puedan distinguir unas de otras.

Buda Gautama redefinió la consecución del nirvana presente en el hinduismo mediante un proceso de meditación en el que se analiza el cuerpo y la mente como carentes de una individualidad intrínseca. En ese proceso existe un vacío de individualidad (śūnyatā) de todo lo presente en el cuerpo y mente del sujeto. Esta falta de una individualidad es también común en todos los fenómenos del universo.

Al igual que en el hinduismo, la realización del nirvana budista implica la liberación definitiva del sufrimiento de la existencia o de los diferentes estados de reencarnación a los que todos los seres están sujetos. Pero en el budismo esta idea será llevada hasta sus últimas consecuencias. Śūnyatā es por tanto la naturaleza final de la realidad según el budismo, como el encuentro con la naturaleza más profunda de uno mismo.



Las cuatro etapas del nirvana en Budismo son cuatro grados de acercamiento al Nirvana completo hasta el grado de Arahant (alguien que ha ganado el entendimiento profundo sobre la verdadera naturaleza de la existencia, que ha alcanzado el nirvana y en consecuencia, no volverá a nacer de nuevo.). Las cuatro etapas son Sotāpanna, Sakadāgāmī, Anāgāmī y la final ya nombrada: Arahant.

La enseñanza de las cuatro etapas de la iluminación, es un elemento central en el budismo temprano y en la escuela Theravada (principalmente en Sri Lanka, Tailandia y Myanmar). En el Canon Pali -colección de los antiguos textos budistas escritos en el idioma Pali, que constituye el cuerpo doctrinal y fundacional del budismo Theravada- del Budismo Theravada, la frase Camino Medio se adscribe a la descripción que Buda da sobre el Noble sendero óctuple, como una forma de actuación entre extremos de austeridad e indulgencia sensual. Filósofos posteriores también han utilizado la denominación Camino Medio para referirse a las enseñanzas del Buda como un punto de vista entre los extremos de la existencia y la no existencia.


1 comentario:

victor manuel dijo...

Muy difícil de lograr ese nirvana (nibana en pali) el orgullo y/o la ideación del yo es lo primero que extinguir...